• Las obras han consistido en un primer tramo canalizado subterráneo desde el “Salar de los Canos” hacia el mar y el acondicionamiento de la desembocadura final con un encauzamiento a cielo abierto.

El cauce de la Rambla del Algarrobo discurre en su tramo final, de algo más de unos 1.824 metros de largo hasta su desembocadura al mar Mediterráneo, en una zona notablemente urbanizada y con un valor ambiental considerable que integra la zona del Salar de los Canos, la Charca del Gato y la ribera del mar.

Según ha indicado el concejal de Infraestructuras del ayuntamiento de Vera y a su vez consejero delegado de la empresa mixta CODEUR encargada de proyectar la actuación y coordinar las obras, Alfonso García, “los trabajos de laminación y evacuación al mar de la Rambla del Algarrobo eran necesarios para evitar las frecuentes inundaciones en la zona y los riesgos de posibles avenidas provocados por tormentas y crecidas de la rambla”. El edil veratense ha explicado durante una visita a la zona que “el objetivo de la actuación es recoger las aguas provenientes de la Rambla del Algarrobo y conducirlas al mar desde el Salar de los Canos, siempre reservando un nivel de lámina de agua en el humedal”.